domingo, 1 de abril de 2012

TARTA DE MOJITO




INGREDIENTES: 
Para la base:
200 gr de galletas maría
50 gr de mantequilla
1 chorrito de ron
El zumo de medio limón

Para el relleno:
1 sobre de gelatina neutra
300 gr de queso philadelphia o mascarpone(según el gusto de cada uno)
3 limas
100 gr de azúcar
Medio vaso de ron blanco
1 vaso de agua
1 manojo grande de hojas de hierbabuena o de menta

Para la cubierta
1 sobre de gelatina de limón
½ litro de agua
Colorante azul o verde

PREPARACIÓN:
Base:
 Ponemos en un bol la mantequilla y derretimos en el microondas o en el fuego, como se prefiera.
 Mientras de derrite picamos las galletas(a mano o con la picadora).
 Una vez picadas, añadimos las galletas a la mantequilla, junto con el chorrito de ron y el zumo de limón. Mezclamos todo hasta que quede una masa homogénea.
Ponemos esta mezcla en un molde desmontable(o uno normal con un poco de mantequilla untada) y cubrimos toda la base del molde, para que que quede compacta podemos presionar con una cuchara o una espátula. Una vez extendida la mezcla reservamos en el frigorífico. 

Relleno:

Hacemos zumo de las tres limas, y rallamos la piel de las tres, reservamos.
En un cazo ponemos el azúcar, el agua y el ron, ponemos al fuego y vamos removiendo hasta que el azúcar esté disuelto del todo. Añadimos la hierbabuena o menta, y el zumo y las ralladuras de las limas, una vez rompa a hervir lo ponemos a fuego muy suave y dejamos ahí unos 20 minutos. Pasado este tiempo lo quitamos del fuego y esperamos a que se enfríe.
Una vez frío colamos y volvemos a poner al fuego, disolvemos la gelatina neutra y añadimos el queso, removemos hasta que este todo mezclado.
Una vez mezclado vertemos sobre la base de las galletas y metemos en la nevera hasta que quede cuajado(si es de las vísperas, mejor).

Cubierta:
En un cazo ponemos 250 ml de agua y cuando rompa a hervir añadimos el sobre de gelatina, una vez disuelta añadimos los otros 250 ml de agua, esta vez fríos y removemos bien, para darle el color verde añadimos unas gotas de colorante azul o verde. Dejamos que enfríe un poco y añadimos al relleno, metemos en el frigorífico y dejamos reposar hasta que la gelatina quede sólida.

Justo antes de comer desmoldamos y adornamos con una tira de piel de limón o lima.

Esta tarta, como todas las de queso, es mejor comer de un día para otro.